Después de la estrategia israelí de asfixia financiera
Hamas está luchando contra una grave crisis financiera en Gaza, incapaz de pagar a sus combatientes y funcionarios mientras Israel intensifica su estrategia para asfixiar económicamente al grupo terrorista, según revela una investigación del Wall Street Journal.
El grupo que gobierna Gaza ha sufrido un duro golpe desde que Israel suspendió el mes pasado el ingreso de ayuda humanitaria al territorio palestino, cortando una crucial fuente de ingresos que Hamas utilizaba mediante la confiscación y reventa de estos suministros, de acuerdo con el reporte basado en fuentes de inteligencia árabes, israelíes y occidentales.
“Aunque dispongan de grandes cantidades de dinero en efectivo, su capacidad para distribuirlo sería muy limitada en estos momentos”, declaró al WSJ Eyal Ofer, investigador especializado en la economía gazatí, explicando que los métodos habituales de Hamas para realizar pagos se han vuelto extremadamente arriesgados bajo la vigilancia militar israelí.
Fuentes citadas por el periódico confirmaron que muchos empleados gubernamentales en Gaza han dejado de recibir salarios, mientras que combatientes de alto rango y personal político de Hamas comenzaron a recibir solo la mitad de su paga habitual durante el reciente Ramadán, generalmente entre 200 y 300 dólares mensuales.
El ejército israelí ha informado sobre operaciones específicas contra la infraestructura financiera de Hamas, eliminando a cambistas clave y funcionarios responsables de la distribución de fondos, obligando a otros a esconderse, según detalla el WSJ.
Antes del actual conflicto, Hamas recibía transferencias mensuales de 15 millones de dólares de Qatar y había acumulado reservas estimadas en unos 500 millones de dólares, gran parte en Turquía, de acuerdo con la investigación periodística.
Desde el inicio de la guerra, Israel restringió severamente la entrada de efectivo a Gaza. Hamas inicialmente respondió sustrayendo aproximadamente 180 millones de dólares de sucursales del Banco de Palestina y otras instituciones financieras locales, según declararon al diario funcionarios palestinos.