La inseguridad volvió a golpear a los vecinos de San Borja, esta vez, un chifa ubicado en la avenida Rosa Toro. Fue escenario de un violento asalto que ocurrió en cuestión de segundos, dejando a trabajadores y comensales completamente indefensos.
Dos sujetos armados ingresaron al establecimiento alrededor de las 9 de la noche y, sin mediar palabra, amenazaron con armas de fuego a las personas presentes. El primero en ser atacado fue el vigilante del local, a quien encañonaron mientras intentaba mantener la calma. Una de las trabajadoras trató de resistirse arrojando su celular, pero fue rápidamente superada por los delincuentes.
Los asaltantes no solo se llevaron el dinero de la caja registradora, sino que también robaron pertenencias de los clientes, entre ellas relojes, celulares y billeteras. Algunos de los asistentes se encontraban acompañados de niños, lo que aumentó la tensión y el miedo en el local.
Según testigos, los criminales actuaron con rapidez y coordinación. Las cámaras de videovigilancia captaron cada momento del atraco, lo que ha permitido a la Policía Nacional iniciar las investigaciones. En las imágenes se observa claramente que los asaltantes estaban encapuchados, aunque algunos rasgos faciales quedaron expuestos. También se identificó un tercer implicado que aguardaba afuera en un automóvil, cumpliendo el rol de campana.
La propietaria del restaurante, visiblemente afectada, confirmó que el negocio no volverá a operar por el momento. Señaló además que este no es un caso aislado en la zona. “Ya han asaltado otros negocios cerca de aquí. Estamos viviendo con miedo”, declaró a la prensa.
Los comerciantes del sector expresaron su preocupación y exigieron a las autoridades mayor presencia policial. “Necesitamos patrullaje constante. No puede ser que el hampa actúe con total impunidad”, comentó un vendedor de la zona. Otro vecino fue más crítico: “Parece que hoy el delincuente tiene más derechos que la gente honesta”.