Barcelona amplió su ventaja en la cima de LaLiga a cuatro puntos a pesar de solo empatar 1-1 con el Real Betis.
Los Blaugrana buscaban ampliar la brecha a seis puntos sobre el Real Madrid después de su derrota más temprano en el día, pero no pudieron aprovechar completamente la situación.
Sin embargo, el Betis respondió casi de inmediato. Apenas diez minutos después, después de que Antony ganara un córner, Giovani Lo Celso entregó un centro al imponente Natan, quien cabeceó con potencia más allá de Wojciech Szczesny para igualar el marcador.
Barcelona presionó para recuperar la ventaja con oportunidades que llegaban rápidamente. Pedri vio un potente disparo desviado por Adrian, mientras que tanto Torres como Yamal estuvieron cerca pero no lograron convertir desde posiciones prometedoras.
La segunda mitad comenzó de manera similar, con un alto octanaje. Antony lanzó un disparo desviado para Betis justo después del reinicio, y poco después, Kounde fue detenido por una magnífica parada de Adrian después de ser habilitado por Pedri.
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Hansi Flick hizo cambios mientras los anfitriones continuaban su búsqueda de un ganador, introduciendo a Raphinha, Eric García y Fermín López en un intento de romper el empate.
El extremo brasileño casi tuvo un impacto instantáneo con un fuerte tiro libre que Adrian logró contener, antes de cabecear cerca del poste lejano momentos después.
Por su parte, el Betis no estaba contento con defenderse y realizó varios cambios ofensivos, con Chimy Ávila y Cédric Bakambu uniéndose a la refriega.
Natan, ya en el marcador, estuvo cerca de un segundo gol espectacular con un disparo desde larga distancia que obligó a Szczesny a realizar una salvada rápida.
A medida que el juego entraba en los últimos 10 minutos, la intensidad aumentaba aún más. El Barça tuvo varias oportunidades tardías, incluida una secuencia caótica en la que el disparo de Yamal fue bloqueado y la chilena de Lewandowski fue despejada.
Jules Kounde recibió una tarjeta amarilla por derribar a Rodriguez mientras los ánimos se caldeaban en los últimos minutos.
En un momento extraño cerca del final, Llorente chocó tanto con Gavi como con el árbitro, deteniendo un contraataque del Barcelona y ejemplificando la naturaleza frenética del partido.