Según todos los informes, Kylian Mbappé está prosperando en el Real Madrid. Recién salido de un sensacional hat-trick contra el Manchester City en la Liga de Campeones, la superestrella francesa está demostrando su valía en el escenario más grande. Pero mientras las cosas van bien en España, en Francia se está desarrollando una historia diferente, una que ha obligado a Mbappé a actuar.
El verano pasado, la estrella francesa acaparó titulares no solo por su fichaje por el Madrid, sino también por convertirse en el mayor accionista del equipo de la Ligue 2, Caen, el club donde comenzó su carrera futbolística.
¿Su ambición? Revivir la fortuna del club y devolverlo a su antigua gloria. Sin embargo, a solo unos meses del proyecto, el equipo se encuentra al borde del desastre, en el fondo de la tabla y enfrentando la posibilidad de su primer descenso a la tercera división en 41 años.
Carrusel de entrenadores: Dos entrenadores entran, dos salen
La turbulencia comenzó temprano. En octubre pasado, con Caen luchando por encontrar forma, el club tomó la controvertida decisión de separarse del entrenador Nicolas Seube, una leyenda local cuya salida fue recibida con frustración por parte de los aficionados. El club nombró rápidamente a Bruno Baltazar, un entrenador portugués con experiencia en Bulgaria, Chipre y Portugal, esperando un cambio de rumbo. Pero en lugar de revertir su suerte, la situación empeoró.
La breve tenencia de Baltazar fue un desastre. En solo siete partidos, no logró asegurar ni un solo punto, con el equipo anotando solo una vez durante ese período. La racha de 11 partidos sin victorias hundió a Caen en el fondo de la Ligue 2, dejándolos a 11 puntos de la salvación con el tiempo agotándose rápidamente.
La presión para actuar aumentaba, según Ouest-France. Con la temporada escapándose, la jerarquía del club, liderada por Mbappé y su consorcio, tomó la decisión: Baltazar estaba fuera. ¿Su reemplazo? Michel der Zakarian, el ex entrenador del Nantes conocido por su enfoque sin rodeos y su capacidad para inculcar disciplina en equipos en apuros. Ahora, el desafío está claro: lograr una misión de rescate milagrosa o enfrentar el descenso.
Mbappé hace una visita sorpresa un día después del hat-trick contra el City
Con el destino del equipo en el aire, el jugador de 26 años dio un paso inesperado: voló a Normandía para entregar un mensaje personal de ánimo a los jugadores y aficionados. Llegando al campo de entrenamiento poco después de sus hazañas en la Liga de Campeones, la presencia de Mbappé envió una señal clara: no es solo un inversor; está invertido en su éxito.
Si estoy aquí, es porque creo en ello. Esta semana puede ser decisiva
Después de su visita sorpresa al @SMCaen, Kylian Mbappé se tomó el tiempo de conversar con unos cincuenta aficionados que lo esperaban en el estadio d’Ornano.
“Yo creo [que podemos ganar]. Tú también debes creerlo”, dijo al equipo, según informó RMC Sport. “Conocí a los jugadores, a los empleados. No vi a nadie rendirse. Esta semana puede ser clave con la llegada de un nuevo entrenador y un partido importante por delante.”
También se dirigió a los aficionados, reconociendo su papel vital en la lucha que se avecina: “Quiero agradecerles a todos por el apoyo que le dan al club y a los jugadores. Eso es lo que más necesitan. La situación es difícil, pero si nos mantenemos unidos, saldremos adelante. Los chicos saben lo que tienen que hacer. Una victoria puede cambiarlo todo. Si estoy aquí, es porque creo en el equipo.”