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En una temporada plagada de desafíos inesperados, el Real Madrid se encuentra bajo escrutinio no por el rendimiento de los jugadores o las tácticas de entrenamiento, sino por una fuente poco probable: la gestión del estado físico. A pesar de mantener su resistencia en el campo, ha surgido una crisis interna, con señalamientos hacia una figura que durante mucho tiempo se ha considerado fundamental para el éxito del club: el preparador físico Antonio Pintus.
Conocido cariñosamente como “El Sargento” por sus rigurosos programas de estado físico, Pintus ha construido una reputación como un maestro arquitecto de la condición física. Sin embargo, los problemas crecientes de lesiones del club y los murmullos de descontento entre jugadores y personal han generado dudas sobre si sus métodos siguen siendo efectivos en la era moderna.
Desde el inicio de la temporada 2023-24, el Real Madrid ha sufrido una crisis de lesiones sin precedentes. Según informes recientes, se han registrado 25 lesiones, afectando a jugadores clave como Vinicius, Jude Bellingham, Eduardo Camavinga y Eder Militao. La devastadora rotura del ligamento cruzado anterior de este último durante un partido contra Osasuna lo ha dejado fuera de juego durante toda la temporada.
Estas lesiones han debilitado la plantilla, obligando al entrenador Carlo Ancelotti a adaptarse y rotar su alineación con frecuencia. Sin embargo, a pesar de la capacidad del equipo para seguir siendo competitivo, se encuentran a solo tres puntos detrás del Barcelona en La Liga y han protagonizado remontadas dramáticas en la Champions League, la creciente lista de jugadores marginados ha alimentado las frustraciones internamente.
Un informe reciente de The Athletic destacó que 17 jugadores ya han enfrentado contratiempos por lesiones esta temporada. Si bien los problemas físicos no son raros para un club que compite en múltiples frentes, el volumen de lesiones ha encendido las alarmas dentro de la jerarquía del club.
Enfoque en Pintus
Antonio Pintus, una figura celebrada en la era dorada del Real Madrid, ahora enfrenta cuestionamientos sobre sus métodos. Después de desempeñar un papel crucial en los éxitos de la Champions League del club bajo Zinedine Zidane, Pintus regresó en 2021 a petición de Carlo Ancelotti. Sus regímenes de entrenamiento meticulosos e intensos le valieron elogios, incluido el reconocimiento público de Luka Modric, quien una vez atribuyó los programas del italiano a la resistencia de Los Blancos durante su triunfo en la Champions League de 2022.
Sin embargo, las tornas han cambiado. Según informes, algunos jugadores y miembros del personal sienten que los métodos de Pintus, aunque efectivos en el pasado, pueden estar desactualizados y ser excesivamente exigentes para el fútbol moderno. Relevo informa que algunos en el club lo ven como “un entrenador de atletas”, sugiriendo que sus programas priorizan la producción física sobre la condición física específica del fútbol.
Esta percepción ha generado debates sobre si sus métodos de entrenamiento están contribuyendo a la crisis de lesiones. Los críticos señalan que algunos ejercicios en las rutinas de Pintus “no son particularmente adecuados para el fútbol”, lo que potencialmente hace que los jugadores sean más propensos a contratiempos físicos.
Disensión dentro del equipo
La insatisfacción se extiende al vestuario, donde algunos jugadores se han vuelto escépticos respecto a los métodos del entrenador de 62 años. A pesar del innegable historial del entrenador, hay una sensación de que su enfoque ya no se alinea con las demandas del panorama futbolístico actual, que incluye horarios agotadores y expectativas físicas elevadas.
The Athletic agrega que incluso la relación de Carlo Ancelotti con Pintus ha enfriado supuestamente. Se dice que el entrenador italiano ha expresado preocupaciones sobre la renuencia del preparador físico a asumir la responsabilidad por la recuperación de los jugadores. Esto ha aumentado la tensión dentro del cuerpo técnico, con algunos miembros cuestionando el énfasis puesto en métricas físicas como la distancia recorrida durante los partidos.
En medio del creciente escrutinio, Pintus aún cuenta con el apoyo inquebrantable del presidente del club, Florentino Pérez. Esta lealtad se deriva de sus contribuciones comprobadas a los éxitos del Real Madrid a lo largo de los años. Sin embargo, con la presión creciente de jugadores y personal, la postura de Pérez pronto podría enfrentar desafíos.
Las próximas semanas serán decisivas. Si la crisis de lesiones persiste, los campeones vigentes de La Liga pueden tener que reevaluar su dependencia de los métodos de Pintus. Si bien sus logros pasados no pueden ser ignorados, la situación actual subraya la necesidad de adaptabilidad en un deporte que evoluciona rápidamente.
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