Durante décadas, Milán se ha enorgullecido de su solidez defensiva, contando con nombres legendarios como Paolo Maldini, Franco Baresi, Alessandro Nesta, Jaap Stam y muchos más. La capacidad del club para producir o mejorar defensores centrales de élite era una característica definitoria. Sin embargo, en los últimos años, la situación ha cambiado drásticamente.
Aunque ha habido algunas adquisiciones exitosas, la línea defensiva del Milán ha luchado en gran medida con la inconsistencia, las lesiones y las transferencias cuestionables. La temporada pasada, los problemas surgieron por falta de profundidad, mientras que esta temporada, la preocupación es una disminución en la calidad.
Informes de Calciomercato sugieren que las debilidades defensivas del club son una razón principal de lo que se ha etiquetado como una “temporada desastrosa”. Con Fikayo Tomori supuestamente dirigiéndose hacia una salida debido a su mal rendimiento y Strahinja Pavlovic luchando con la consistencia, los Rossoneri se encuentran necesitados de una reestructuración defensiva. Malick Thiaw sigue siendo la opción más sólida pero aún no ha alcanzado el nivel requerido para liderar la defensa. Mientras tanto, Matteo Gabbia ha surgido como la única opción segura, con actuaciones sólidas ganándole la confianza del club.
En medio de estos desafíos, el entrenador Sergio Conceicao está planeando un cambio táctico, uno que podría redefinir el estilo de juego del Milán.
Reestructuración táctica de Conceicao
La identidad del Milán en los últimos años ha estado arraigada en variaciones de las formaciones 4-3-3 y 4-4-2. Aunque se han hecho ajustes menores para acomodar las fortalezas de los jugadores, el marco táctico ha permanecido en gran medida sin cambios. Ahora, Conceicao está contemplando un cambio a una defensa de tres hombres, una estructura raramente vista desde que Stefano Pioli se vio obligado a adoptarla debido a una crisis de lesiones.
Según Corriere della Sera, el objetivo de este nuevo sistema no es solo reforzar la defensa, sino también desbloquear el potencial ofensivo del Milán. El entrenador portugués cree que esta forma sacará lo mejor de Santiago Gimenez, el fichaje de invierno que ha tenido dificultades para encontrar consistencia desde su llegada. La idea es empujar a Theo Hernández y Rafael Leao a posiciones más avanzadas, permitiéndoles operar con mayor libertad.
El papel de Pulisic y Félix
Si bien el cambio táctico tiene como objetivo maximizar el impacto de Leao y Gimenez, también plantea preguntas sobre los roles de Christian Pulisic y Joao Félix. Gazzetta dello Sport analizó las posibles consecuencias del nuevo sistema señalando que podría ser “muy limitante” para el trío ofensivo de Leao, Pulisic y Félix. Argumentó que un esquema 3-4-3 sería más lógico, ya que permitiría dos delanteros anchos detrás de Gimenez.
“Con dos mediocampistas defensivos, los roles de Fofana y Reijnders no cambiarían mucho, tendrían posiciones y responsabilidades similares”, explicó Bianchin.
“Sin embargo, Christian Pulisic se beneficiaría de esta configuración. En el actual 4-2-3-1, se espera que proporcione un apoyo defensivo significativo ya que Joao Félix, Leao y Gimenez no son conocidos por su contribución defensiva. En un 3-4-3, sin embargo, tendría a Jiménez [o Musah] cubriéndolo”.
El cambio también señala el fin del experimento de los ‘Fantastic Four’, ya que alinear a Leao, Pulisic, Félix y Gimenez juntos en este sistema sería casi imposible. En su lugar, el trío ofensivo rotaría, con solo dos lugares disponibles en la mayoría de los partidos.