El entrenador del Manchester City, Pep Guardiola, una de las figuras más decoradas e influyentes del fútbol, se encuentra navegando aguas turbulentas. Una combinación de malos resultados, importantes desafíos extradeportivos y una especulación implacable sobre su futuro ha marcado la temporada actual como una de las más definitorias en la carrera de Guardiola.
Las actuaciones habitualmente imperiosas del City han fallado esta temporada. Solo una victoria en sus últimos 12 partidos ha dejado a los actuales campeones de la Premier League en un séptimo lugar poco familiar, rezagados respecto a los líderes de la liga, el Liverpool, por una abrumadora diferencia de 12 puntos. Lesiones, incluida una lesión que terminó la temporada del mediocampista Rodri, y estrellas bajo rendimiento como Erling Haaland han complicado aún más las luchas del City.
El español abordó la caída del equipo antes del derbi de Manchester a principios de este mes, afirmando su lealtad: “No sería capaz de dormir, incluso peor que ahora, si pensara que me voy cuando el club está en esta situación.” A pesar de las derrotas consecutivas ante el Manchester United y el Aston Villa, Guardiola sigue firme en su compromiso de darle la vuelta a la situación.
Rumores de dimisión y la resistencia de Guardiola
Ante la creciente escrutinio, se han difundido rumores sobre una posible dimisión. Sin embargo, Guardiola fue rápido en desechar tales ideas, incluso abordando humorísticamente la posibilidad de despido: “Me pueden despedir. Eso puede pasar si seguimos así,” comentó.
Aun así, el mandato del español no terminará prematuramente, sugiere el Manchester Evening News. Con 19 trofeos, incluidos seis títulos de liga y una Champions League, Guardiola ha construido un legado que le otorga una rara amplitud. Las luchas actuales de los Sky Blues, aunque significativas, palidecen en comparación con las alturas a las que el entrenador español ha llevado al club durante su mandato.
Acusaciones financieras acechando al City
Los problemas extradeportivos han puesto a prueba aún más la determinación de Guardiola. El Manchester City enfrenta más de 115 cargos de presunta mala conducta financiera, con una audiencia sobre el asunto que concluyó a principios de este mes. La Premier League y el club ahora esperan un veredicto, que podría llevar a apelaciones que se extiendan hasta finales de 2025.
A pesar de la incertidumbre, el entrenador de 53 años ha sido firme en su defensa del club: “Por el momento, somos inocentes hasta que se demuestre que somos culpables,” afirmó. El entrenador también tranquilizó a los aficionados de que su compromiso es inquebrantable, independientemente del resultado: “Absolutamente no consideraré mi futuro si depende de estar aquí o en la League One.”
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