Los indicadores clave de BBVA Research muestran un mayor dinamismo económico en marzo, impulsado por el efecto calendario y una fuerte recuperación en el consumo.
La economía peruana está experimentando señales de recuperación en marzo, con indicadores que sugieren un crecimiento acelerado, según el análisis más reciente de BBVA Research publicado esta semana.
Este aumento en la actividad económica se debe en parte a un efecto calendario positivo, ya que la Semana Santa en 2025 se celebró en abril, a diferencia del año anterior cuando se adelantó a marzo.
En cuanto a la oferta, la producción de electricidad se recuperó con fuerza en marzo, con un crecimiento interanual del 4.8%, luego de haber registrado una caída del 1.6% en febrero.
Los indicadores de consumo también mostraron una mejora significativa en marzo. De hecho, el índice Big Data de BBVA Research creció un 10.7% interanual, superando el 5.5% de febrero, lo que indica un mayor dinamismo en el gasto familiar.
Además, las importaciones de bienes de consumo mantuvieron su sólida tendencia positiva, con un crecimiento interanual del 19.6%, acumulando siete meses consecutivos de expansión, según datos de Sunat.
En cuanto a la inversión en el país, las importaciones FOB de bienes de capital aumentaron un notable 22.2% interanual en marzo, después de un crecimiento del 9.5% en enero, logrando así doce meses seguidos de incremento.
Por otro lado, en febrero la actividad económica creció un 2.7% interanual, por debajo de la proyección de Bloomberg (3.4%), debido a un efecto base negativo generado por el año bisiesto en 2024.
El componente no primario experimentó un crecimiento del 2.5%, destacando el buen desempeño del sector construcción, que avanzó un 5.9%, impulsado por el aumento en el consumo de cemento.
El sector servicios también mostró un crecimiento sostenido durante el período analizado, con un desempeño positivo en los rubros de transporte y comercio.
En cuanto a las actividades primarias, estas crecieron un 2.3%, destacando el sector pesquero con un repunte del 24.6%, impulsando también la manufactura primaria en un 15.1%.
El sector agropecuario avanzó un 4.4% gracias al buen desempeño agrícola, con una mayor producción de uva y mango, aunque la minería metálica se contrajo debido a la caída en la producción de oro y zinc.
En términos mensuales, el Producto Bruto Interno desestacionalizado cayó un 0.1% en febrero en comparación con enero, reflejando un desempeño moderado de la economía peruana en los primeros meses del año, según el INEI.
El carry-over a febrero se ubicó en un sólido 2.1%, proporcionando una base firme para las proyecciones de crecimiento durante el resto del año.
BBVA Research estima un crecimiento cercano al 4% para el primer trimestre del año y proyecta un crecimiento del 3.1% para el cierre de 2025, aunque advierte sobre los posibles riesgos derivados de un entorno internacional más complejo.
Las tensiones comerciales a nivel global podrían afectar negativamente el crecimiento económico futuro del país, por lo que es importante monitorear de cerca la evolución de la economía mundial, según el informe de BBVA Research.
“Por ahora, el impacto en la economía peruana es limitado, pero la incertidumbre global sigue siendo alta”, advierte el informe, señalando que la situación internacional representa un factor de riesgo importante para el desempeño económico del país.