Los ciudadanos que todavía estaban bajo los efectos de la cruda han despertado hoy para darse cuenta de que ya es enero y que es hora de pagar el predial. Después de unas semanas de desconexión, se han enfrentado a la realidad de un nuevo año, con nuevos retos y facturas por pagar. El impuesto predial, que ha aumentado significativamente este año, ha llegado como una dosis de realidad para muchos.
El envío temprano de los recibos de pago ha sacado a la mitad de la población de su resaca de fin de año, obligándolos a pensar en formas de conseguir dinero ahora que el aguinaldo es solo un recuerdo. Además del predial, este mes también llegan otras facturas como la del agua y la luz, lo que ha complicado aún más el inicio del año para muchos.
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