El Gobierno de Donald Trump ha dado luz verde a un intercambio de tierras necesario para que Rio Tinto y BHP construyan una de las minas de cobre más grandes del mundo, a pesar de las preocupaciones de las comunidades nativas sobre la destrucción de un sitio de valor religioso.
Esta decisión probablemente aumentará la tensión entre los grupos indígenas que buscan preservar las tierras históricas y los Gobiernos occidentales que desean impulsar la producción de minerales esenciales para contrarrestar el dominio del sector por parte de China.
El Servicio Forestal de Estados Unidos, perteneciente al Departamento de Agricultura, ha anunciado que volverá a publicar en un plazo de 60 días un informe medioambiental necesario para llevar a cabo el intercambio de tierras del proyecto Resolution Copper.
La mina subterránea, aprobada por el presidente Donald Trump en su primer mandato y luego revocada por Joe Biden, abastecería más de una cuarta parte de la demanda estadounidense de cobre y sería fundamental para el plan de Trump de impulsar la industria minera en Estados Unidos.
El cobre se utiliza en la construcción, el transporte, la electrónica y muchas otras industrias, y Estados Unidos importa aproximadamente la mitad del cobre que necesita cada año.
Sin embargo, la construcción de la mina implicaría la creación de un cráter que destruiría el yacimiento de Oak Flat, un lugar sagrado para los apaches San Carlos de Arizona. Esta situación ha generado una fuerte oposición por parte de las 22 tribus indígenas del estado, a excepción de una, así como del Congreso Nacional de Indios Americanos.
BHP, que posee el 45% del proyecto, ha declarado que “Resolution se ha comprometido a mantener un diálogo abierto con la comunidad local y las tribus nativas americanas para avanzar de manera responsable en el proyecto”.
Rio Tinto, que posee el 55% de la propiedad, ha afirmado que planea mantener todo el cobre de Resolution en Estados Unidos en caso de que se apruebe la mina. La empresa controla una de las dos fundiciones de cobre en Estados Unidos.