Nike parece estar persiguiendo alguna tecnología innovadora en el mundo de los zapatos con la revelación de una solicitud de patente que presentó este mes.
Su diseño parece ir más allá de las características habituales, haciendo referencia a válvulas, botones y “características de comunicación electrónica”. Lo que Nike llama un “Sistema de Control de Fluido Activo”, implica el uso de energía interna para controlar activamente el ajuste y la función, como se menciona en un documento de 133 páginas presentado en la Oficina de Patentes de EE. UU.
Dibujo conceptual muestra fuente de alimentación externa
Los dibujos presentados junto con la solicitud de patente detallan una fuente de alimentación externa en el lado del zapato donde se podría enchufar cuando no esté en uso. Entre las funcionalidades descritas en el documento, se menciona el desarrollo de “controladores de movimiento de fluidos y presión de soporte de pie ajustable” y “características de botones de entrada de usuario”.
La parte inferior del zapato presenta una suela que albergaría mecanismos para controlar el soporte a través de cámaras de fluido. Las características de diseño también incluyen un sistema de bombeo, sistema de soporte para el pie, sensores de presión y trenes de engranajes.
Parece que habría vejigas llenas de líquido que trabajan para ajustar el soporte del pie sobre la marcha. El sistema reaccionaría y se ajustaría a las condiciones de la superficie y los niveles de fatiga mientras se corre, actuando como una especie de sistema de suspensión. Las vejigas podrían inflarse y desinflarse para cambiar la amortiguación y el soporte. Las válvulas solenoides y las bombas serían alimentadas y trabajarían para mover el fluido dentro y fuera de las vejigas.
Los sensores de presión miden la fuerza del pie
El zapato también mediría cuánta fuerza está ejerciendo el corredor en diferentes áreas de su pie, utilizando un sistema de sensores de presión. La mención de “controles de usuario” sugiere que podría haber una función de ajuste manual además del sistema electrónico para ajustar la amortiguación y el soporte. Es posible que el zapato pueda ser controlado a través de una aplicación o inteligencia artificial.
La especulación sobre la ventaja práctica de tales sistemas incluye un soporte en el zapato que se ajusta a medida que te fatigas o cambias de terreno. A medida que el cuerpo se cansa, la mecánica de la carrera se descompone. El terreno variable también altera las necesidades de amortiguación y soporte de un corredor al pasar de la carretera a superficies de tierra o rocosas. En este caso, al alterar la rigidez del mediopié inflando o desinflando las vejigas, el zapato podría ser personalizado durante una carrera real para reaccionar a estos elementos cambiantes.
Foto: Polar
Un zapato con conectividad
No solo mejorarían el nivel de precisión y la adaptabilidad del zapato la estabilidad, el ajuste y la comodidad, también podría reducir lesiones. En esencia, podría considerarse el primer “zapato inteligente”. Esto también abre las posibilidades de conectar el zapato a aplicaciones como Strava y Garmin Connect. Los datos también podrían proporcionar información para el análisis y corrección de la marcha para un mejor rendimiento y prevención de lesiones.
Al igual que con otros zapatos de rendimiento de vanguardia de Nike, la durabilidad y el costo son posibles desventajas, al igual que la vida útil de la batería y el mayor riesgo de mantenimiento y mal funcionamiento. Mientras el mundo espera el próximo zapato revolucionario de Nike, los atletas pueden querer empezar a contribuir a su alcancía con tiempo de antelación.
Junto con la solicitud de patente del zapato, Nike presentó otras 32 patentes el mismo día. Entre los artículos se encontraban sandalias, calcetines, camisetas, suelas y otros diseños de zapatos.