Entrenar para un triatlón en la primavera es un poco extraño. Un día hace 15 grados Celsius y soleado y al día siguiente está nublado y se siente como -1 grado Celsius. Incluso el clima puede cambiar drásticamente a lo largo de un solo día, lo que dificulta predecir qué ponerse, a dónde ir y qué hacer en tus entrenamientos. Con eso en mente, aquí están las seis etapas emocionales del entrenamiento de triatlón en primavera.
Está tan agradable afuera
Miras afuera y hace sol, así que te pones con entusiasmo una camiseta y shorts para correr o una camiseta y pantalones cortos para montar en bicicleta y sales. Llevas meses encerrado en casa, así que no vas a desperdiciar un día cálido y soleado.
Ay, qué viento frío
A menudo en primavera hace buen tiempo al sol, pero el viento todavía tiene un toque de frío. Al principio piensas que puedes tolerarlo, pero a los 10 o 15 minutos lejos de casa te das cuenta de que podría ser un poco demasiado frío para la ropa de entrenamiento de verano.
Debería haber traído una chaqueta
En este punto, estás demasiado lejos de casa, así que más te vale terminar la carrera o el paseo. Sin embargo, estás muy frío y deseas haber sido más inteligente y haber pensado en traer una chaqueta. Incluso una camiseta de manga larga habría sido suficiente.
¿Va a llover?
De repente, nubes oscuras se acercan hacia ti. Hace apenas unos momentos todo era sol y cielo azul, pero ahora podrías tener que lidiar con la lluvia. ¿Qué pasa? Decides que no puedes soportar la lluvia además de lo frío que ya estás, así que regresas a casa.
Está caliente de nuevo
Para cuando llegas a casa, esas nubes han desaparecido mágicamente, el viento ha cesado y el sol está brillando sobre ti. Hace calor de nuevo, y te calientas justo cuando llegas a casa.
No puedo esperar para mañana
A pesar de lo miserable que acabas de sentirte, no puedes esperar para salir de nuevo mañana.