Mejora tu velocidad en el agua con estos 3 ejercicios de natación

Nadar con fuerza te ayudará a ser más rápido en el agua, pero no es una gran manera de trabajar en las deficiencias o fallos de tu estilo. Un buen momento para mejorar tu técnica es cuando haces ejercicios. Los ejercicios pueden ayudarte a tener una sensación adecuada del agua y una idea de cómo debería sentirse tu estilo. A partir de ahí, puedes aplicarlo a tu estilo regular, lo que te ayudará a convertirte en un nadador más eficiente y rápido. Aquí tienes tres ejercicios que pueden darte ese impulso después de probarlos solo unas pocas vueltas.

Un brazo estilo libre

Tal vez hayas hecho un brazo estilo libre antes, pero probablemente nadaste con tu brazo inactivo estirado hacia adelante en una posición aerodinámica. Para este ejercicio, mantendrás tu brazo hacia abajo a un lado. Esto hará que sea más difícil mantenerse aerodinámico y a flote, y te obligará a rotar adecuadamente al nadar.

Para ejecutar esto correctamente, debes enfocarte en rotar tus hombros, rotar tus caderas y realizar un patada potente. También necesitarás enfocarte en mantener un codo alto y alcanzar lo más lejos posible delante de ti en cada brazada. Dado que solo estás usando un brazo, es posible que sientas la necesidad de apresurar tu brazada y meter la mano en el agua lo más rápido posible para no hundirte, pero intenta mantener el movimiento suave y relajado. Haz dos o tres vueltas de cada lado antes de pasar al siguiente ejercicio de este conjunto.

Arrastre de dedos

Este ejercicio requiere un codo alto y un alcance completo. Es casi tu brazada normal, pero en lugar de levantar la mano fuera del agua, arrastrarás tus dedos por la superficie del agua. Mantén tus dedos en el agua hasta que alcances completamente hacia adelante, luego atrapa el agua y haz la brazada. Haz dos vueltas de este ejercicio y luego pasa al último.

LEAR  Christian Pulisic entre las estrellas del Milan ya descontentas con el entrenador Sergio Conceição - ¿Realidad o ficción?

Distancia por brazada

Ahora es el momento de poner a prueba las lecciones que aprendiste de los ejercicios anteriores. No vas a nadar al máximo, pero seguirás nadando normalmente. Concéntrate en la rotación de caderas y hombros que te viste obligado a usar en el estilo libre de un brazo y en el codo alto y alcance completo del arrastre de dedos. Cuando estés bajo el agua, asegúrate de tirar la mayor cantidad de agua posible, ayudándote a avanzar y hacer la menor cantidad de brazadas posible por longitud. Después de los dos ejercicios anteriores, esto debería sentirse mucho más fácil y eficiente.